En un partido chato, producto de los nervios y otro poco por las inclemencias del tiempo, River y Boca empataron en uno sin brillar en su juego. Magallán para los de La Ribera y Pezzella para los de Núñez.
Luego de una semana en silencio, ambos equipos jugaron un encuentro chato y deslucido. El único culpable: la lluvia. El campo de juego fue tratado muy mal al igual que la pelota.
Los pelotazos fueron moneda corriente ya que el balón no podía rodar por los charcos de agua.
Mientras River trataba de generar futbol con Pisculichi y Sánchez, Boca lograba controlar a medias la mitad de la cancha. Hasta el gol (a los 22 minutos) ambos conjuntos tuvieron oportunidades de abrir el marcador, pero fue Boca quien de la mano de Magallán pudo convertir luego de un centro producto de un tiro libre y darle la ventaja al con de La Ribera.
Con este resultado, River se obligó a buscar aún más el gol que le de la tranquilidad. Entre Mora y Gutiérrez lograron incrementar las posibilidades de empardar el encuentro.
Luego de un córner, Mercado ejecutó un disparo, luego de un rechazo, que dio en la cabeza y rebotó en la rodilla de Gago en plena área chica de Orión. Vigliano cobró automáticamente penal y roja para el “enganche” de Boca (con el aval del juez de línea) Según el árbitro Gago toco la pelota con la mano, lo que no se entiende en la roja ya que no era último recurso (detrás de él estaba Orión agazapado esperando el pelotazo de frente)
El penal fue pateado de manera muy mal por parte de Mora (el que ejecuta siempre es Teo) El disparo se fue medio metro por arriba del travesaño y Boca respiraba tranquilo.
El segundo tiempo siguió como el primero. Rebotes, rechazos y faltas para amarilla o roja de lo brusco que se jugaba, eran moneda corriente.
River tuvo un poco más el control del juego y pudo convertir a los 33 minutos, luego de un disparo de afuera del área y luego de un rebote por parte de Orión (el único error en todo el partido) Pezzella convirtió el empate.
Vigliano cerró una pésima actuación expulsando a Funes Mori por una fuerte falta.
Al terminar el partido Gallardo, indignado, dijo que “no se pudo jugar al futbol”, refiriéndose al estado del campo de juego. Mientras que en la vereda de enfrente, Arruabarrena comentó “estar orgulloso del grupo. Demostraron tener carácter. Lamentablemente, un error arbitral nos afectó, pero todos nos equivocamos”.
Boca quedó a siete puntos de River. Independiente si gana mañana puede quedar a uno del conjunto de Núñez.
@MatoMontoya
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