Un deporte poco conocido llamado hockey subacuático

La mayoría de la gente no está ni enterada de la existencia del hockey subacuático como deporte. La poca difusión y repercusión mediática en nuestro país produce que pase inadvertido en la sociedad.  Esa es una de las principales causas por la que se les hace difícil a sus cultores realizar la práctica con normalidad y enfocarse solamente en jugar, ya que deben estar pendientes de la parte económica y organizativa ya sea de sus clubes o de la Asociación Argentina.

“El hockey subacuático es un deporte jugado en el fondo de una pileta de natación por dos equipos de 6 jugadores, cada uno usando el equipo básico de buceo; es decir: aletas, luneta y snorkel. El objetivo del juego es empujar o llevar un tejo deslizante a lo largo del fondo de la pileta, mediante el uso de un palo de hockey subacuático, hasta el arco del equipo contrario”, explicó Marcos cabrera, instructor en la escuela Hellfish en Pilar.

Se creó en los años 50 en Inglaterra con el fin de incentivar a los buzos a mantener  su condición física. Tuvo tanta aceptación que se empezó a jugar en distintos clubes de Londres y más tarde por toda Europa. Desde ahí que muchos países como Sudáfrica, Australia y Nueva Zelanda comenzaron a probar esta actividad. Lo interesante es que hoy en día se está practicando en más de 50 naciones.

La llegada del deporte a Argentina tuvo su particularidad ya que fue casi de casualidad. En 1981, Fernando Arbizu, por ese entonces instructor de buceo en el Circulo Militar, leyó un artículo sobre el tema en la revista Sking Divers y comenzó a jugarlo de forma informal en su lugar de trabajo.  Desde ahí que el deporte empezó a crecer de forma muy rápida y en 1996 Argentina participa de su primer Mundial en Durban, Sudáfrica. Luego de esa participación, el equipo argentino no faltó a ningún Mundial más, que es organizado por la Confederación Mundial de Actividades Subacuáticas (C.M.A.S).

“En 2001, se obtuvo la personería jurídica de la Asociación de hockey Subacuático de Argentina (A.H.S.A),  donde hay más de  300 socios que son los que sustentan el deporte con una cuota social”, comentó Carolina Walczack, actual tesorera de la Asociación y jugadora de Regatas de Santa Fe. “También con esto se logró ser miembros plenos de la C.M.A.S y ser reconocidos como representantes del país en los torneos de la especialidad”, agregó.

Los jugadores realizan un gran esfuerzo para que el deporte siga creciendo y una de las claves para lograr eso sería que el Gobierno les dé una mano, no sólo en la parte económica sino también en la infraestructura. Al ser un deporte subacuático lo que piden desde la Asociación es que les cedan un lugar en los Centros de Alto Rendimiento que tiene la Nación.  En 2015 la Argentina tiene posibilidad de ser sede del Panamericano pero para poder ser anfitrión necesitan conseguir una pileta con las características apropiadas para la competencia (las ideales serían las piletas de 50 metros como la del CENARD). Walczack se mostró entusiasmada con esta idea y en tal sentido dijo: “Ojalá tengan una respuesta favorable a los pedidos, porque eso ayudaría muchísimo a fomentar el deporte en el país e ir mejorando el nivel de juego para participar del próximo Mundial”.

Otro de los problemas que se presenta para su práctica es la compra de los materiales y equipo ya que al ser todo importado cuesta conseguirlo. Así que la mayoría de clubes y escuelas mantienen el mismo material de años, cuidándolo para que tenga la máxima duración posible.

Actualmente en los torneos Nacionales participan once equipos, tanto en Femeninos, Masculinos y Juveniles. Igualmente ningún torneo es reconocido por la Asociación. “Nuestro mayor impedimento es conseguir piletas, son carísimas si se la quiere alquilar por varias horas para llevar a cabo la competencia. Así que cuando logramos conseguir alguna, realizamos los torneos Nacionales”, argumentó la defensora del equipo argentino de la categoría Master.

Buenos Aires, Santa Fe, Mendoza y San Luis son las únicas cuatro provincias donde se realiza este deporte. Igualmente en la mayoría no hay clubes sino escuelas, por lo que se presentaron proyectos para que algunos clubes les permitan un espacio y así hacer crecer la actividad. Básicamente lo que necesita el hockey subacuático para poder aumentar su popularidad es que se lo difunda, que los medios le den mayor importancia y que reciba un mayor apoyo del Gobierno nacional para facilitar la actividad a los jugadores.

Tomas Salazar
@pelasalazar