No es un secreto para ninguno de nosotros que la falta de tiempo para realizar una actividad física es una constante en el mundo actual. Varias son las razones entre las que podemos mencionar: Un día que comprende jornadas laborales que oscilan entre las 6 y 8 horas, seguido de 3 0 4 más dedicadas a la formación profesional y pocas horas libres que son indefectiblemente utilizadas para dormir. La otra razón, es la falta de poder adquisitivo que de alguna manera restringe aquellos gastos adicionales como gimnasios, spa y clubes dedicados al esparcimiento. Es por esto que las personas poco a poco abandonan la actividad física y con el tiempo esto se ve reflejado en su cuerpo con la aparición de dolencias físicas que le impiden un desarrollo de vida normal.
En este artículo traigo una opción que puede aliviar de alguna manera la ausencia de la actividad física. El running se ha venido imponiendo como una actividad opcional para aquellos que gustan de actividades al aire libre, no tienen mucho tiempo disponible y lo mejor de todo su práctica no requiere de una gran inversión.
Se define running como la acción de trotar o correr, es una actividad por demás saludable. No tiene el carácter de una competencia con el propósito de demostrar velocidad o resistencia, se trata de un encuentro con el cuerpo donde se impone un ritmo propio, recorriendo circuitos y ciudades de una manera tranquila. La ciudad de Buenos Aires es un lugar ideal para la práctica de esta disciplina por contar con innumerables pulmones y parques de fácil acceso.
Son varios los beneficios que trae consigo la práctica de esta actividad. Correr permite perder peso corporal, tonificar los músculos, y elevar el ritmo cardíaco y respiratorio. Esto conlleva a una mejor oxigenación celular y a un mejor funcionamiento orgánico. Además, con mejor respiración y circulación sanguínea se propicia la regeneración celular, el drenaje y la eliminación de toxinas condensadas en el cuerpo. La piel se pone más saludable, el cabello rejuvenece, los poros se liberan de suciedades y todas las toxinas del cuerpo van desapareciendo de un modo más que adecuado. Además de todos los beneficios desde el punto de vista físico aporta algo muy importante. Despeja la mente. Ayuda a liberar tensiones y a despojarse del estrés con el que convive a diario una persona como consecuencia de sus actividades diarias. Mejora el sentido del humor y una persona con buen humor está más propensa a rodearse de buenas energías.
Ahora que tenemos claros los beneficios que nos proporciona practicar running, veamos algunos consejos prácticos que ayudarán a un correcto desarrollo de la actividad. Correr no involucra grandes desafíos en lo físico. Se debe hacer al ritmo e intensidad que el cuerpo acepte como lo expresamos al comienzo del artículo, sin someterse a dolores ni molestias. También hay que tener ciertas precauciones por ejemplo, realizar un chequeo físico y médico antes de comenzar con la actividad, consultando al especialista si poseemos alguna contraindicación. Algunas condiciones de salud obligan a la práctica de ejercicios que no sean de rebotes y golpes, como es el caso de personas con problemas articulares, de tendones o ligamentos, personas con sobrepeso y también mujeres embarazadas, para quienes el movimiento de rebote del running no será beneficioso. Por último y quizás esta sea la parte en la cual se deba hacer una inversión, es necesario adquirir una indumentaria adecuada para hacer más cómodo y placentero el correr. La ropa debe permitir una saludable transpiración, con prendas de telas especiales de bases naturales. Procurar que el calzado sea adecuado, amortiguando cada paso y otorgando estabilidad y sujeción.
Hechas las recomendaciones necesarias y ahora que conoces los beneficios y las ventajas que trae la práctica del running, no dudes un instante en organizar tu tiempo y dedicarle una hora a esta actividad. Recuerda que en la ciudad de Buenos Aires o cualquier lugar a donde vayas siempre vas a tener una plaza o un parque donde puedas revitalizarte y ayudar a mejorar tu calidad de vida.